lunes, 13 de febrero de 2012

¡Aquí hay tomate!

Lo que está a la vista no necesita anteojos. Sin embargo, por si acaso hay quien se hace el Lorenzo, no es mucho decir que son más de tres los dirigentes de ayuntamientos en Catalunya a los que la ley, de que nos hemos dotado todos en democracia, parece importarles un comino. Pongo por caso lo que practican bastantes representantes gubernativos de corporaciones municipales con el código legal vigente que regula el uso de banderas. De la misma forma, los que a cualquier cosa llaman democracia desde instituciones públicas, hacen caso omiso de las leyes lingüísticas referidas a derechos inalienables de ciudadanos castellanohablantes. Y a mayor abundamiento, como en cuestiones de preceptos legales en vigor, a quienes rigen algunos consistorios de Catalunya, les da lo mismo ocho que ochenta, tampoco se entretienen en comedimientos éticos en el momento de sustraer dinerillos a automovilistas por medio de señales de tráfico que contravienen las normas que las legalizan. Mire por dónde en estos tipos de infracciones dejan muchísimas pruebas en los escenarios donde actúan, cometen quebrantamientos a porrillo, actúan con total premeditación y pese a todo… siguen tan campantes. Resumiendo, en estos bochornosos asuntos, mucho aprietan los testigos recién mencionados; pero, ¿cuánta agua ha de bajar por el Ebro antes de que las autoridades pertinentes nos demuestren a los ciudadanos rasos que todos somos iguales ante la Ley?

sábado, 11 de febrero de 2012

¡Cuando no son pitos son flautas!

A lo que parece, empieza a tener mal cartel en Catalunya el acudir a manifestaciones, con claras reivindicaciones sociales, enarbolando banderas. Así que, tan pronto como caigan en la cuenta los del Govern, lo mismo les da por establecer, en su ofuscación nacionalista, partidas presupuestarias para sufragar la retribución de abanderados para toda concentración popular. Y para colmo de desgracias, de rebote, acaban los de abajo, como de costumbre, un poco más tiesos y con menos resortes a los que echar mano. A fin de cuentas, no sería la primera vez que nuestros representantes gubernamentales sorprenderían al pueblo llano con su inexplicable orden de prioridades.

viernes, 3 de febrero de 2012

¡La mayor ventura es gozar de la coyuntura!

Qué tiempos aquellos en los preámbulos de la crisis, cuando los “patriotas” gobernantes en Catalunya se trasladaban en helicóptero hacia el Prat para coger un avión o hacia el Pirineo con la prole, en fin de semana, para conciliar la vida institucional con la familiar. Por no entrar en detalles sobre vehículos oficiales, me ahorro aquello de los mullidos reposapiés forrados con nobles tejidos. Asimismo, por entonces, incluso, hubo quien daba toques de alerta ante los saltos de alegría que sobrevenían a tanta subvención pública repartida a insignes “patriotas” en la sociedad civil. ¿Lo recuerda?
A mi modo de ver, la mayoría de aquellos y numerosísimos privilegios más de los “patriotas” de antaño está dando al traste ahora con prestaciones sociales fruto del sacrificio de varias generaciones de contribuyentes. Así pues, muchos de los servicios y socorros destinados al pueblo llano, con esto de la crisis, se están desvaneciendo como el humo ¡Cáscaras!
Entiéndame quien me entienda, ya que reconozco que no alcanzo más allá de mis narices sobre las incuestionables exaltaciones que rondan el entendimiento de nuestros “sufridos” “patriotas”. Así que, quién seré yo para poner en cuestión ese batiburrillo al que echan mano quienes, sabiendo más que el tocino rancio, concluyen, las más de las veces, que la culpa de lo malo que se produce en el terruño catalán la tiene “Madrit”. De todos modos, como el rastro que han dejado nuestros gobernantes, en este lamentable espectáculo del despilfarro, parece muy innegable, encuentro sus típicas excusas un poco sospechosas y muy tópicas. ¿He dicho algo?

miércoles, 1 de febrero de 2012

¡Con la mosca detrás de la oreja!

Esta mañana he escuchado a varios tertulianos de alto copete en TV3 afirmar enérgicamente, en clara alusión al dinero que supuestamente el Estado ha dejado de trasferir a la Generalitat de Catalunya, que “lo primero que se ha de hacer es cumplir la Ley” o “los poderes públicos son los primeros que han cumplir la Ley”. Ya que lo comparto a pies juntillas, no sería yo quien pusiese tales aseveraciones en tela de juicio si no fuese por el contexto y lugar preciso en que han sido pronunciadas. Sea como fuere esta cuestión de las trasferencias de caudal entre las diferentes administraciones públicas, esos exhortos a cumplir la Ley me han sentado como tres patadas en la boca del estómago. Dicho de una manera más aclaratoria para evitar equívocos, jamás escuché a alguno de estos u otros tertulianos en la cadena de televisión pública de marras denunciar incumplimientos flagrantes y deliberados de esa ley de la que nos hemos dotados todos en democracia que se perpetran con total impunidad desde instituciones públicas en Catalunya. Sin ir más lejos a mí (castellanohablante y no nacionalista), como a infinidad de catalanes, desde no pocas de estas instituciones públicas se me conculcan derechos lingüísticos e ideológicos inalienables al margen de la Ley. En suma, que a estos excelentemente remunerados tertulianos, afines al nacionalismo, como casi la totalidad de los aparecen en este ente “público” (dato muy significativo de cómo funcionan las cosas en Catalunya), sólo me resta replicarles que quien no quiera oír, que no diga… porque el nacionalismo que se desprende en TV3 socava la paciencia de cualquier ciudadano que anteponga el sentido al sentimiento. ¿Quién ata esta mosca por el rabo?