sábado, 11 de febrero de 2012

¡Cuando no son pitos son flautas!

A lo que parece, empieza a tener mal cartel en Catalunya el acudir a manifestaciones, con claras reivindicaciones sociales, enarbolando banderas. Así que, tan pronto como caigan en la cuenta los del Govern, lo mismo les da por establecer, en su ofuscación nacionalista, partidas presupuestarias para sufragar la retribución de abanderados para toda concentración popular. Y para colmo de desgracias, de rebote, acaban los de abajo, como de costumbre, un poco más tiesos y con menos resortes a los que echar mano. A fin de cuentas, no sería la primera vez que nuestros representantes gubernamentales sorprenderían al pueblo llano con su inexplicable orden de prioridades.

No hay comentarios: